jueves, 16 de junio de 2011

... Y creé este blog.

Siempre me ha apasionado la moda. Desde un punto de vista un tanto pasivo, pero era algo que para mi siempre ha sido importante. Y no me refiero a seguir la última tendencia, si no a tener aquello que la creaba.

Cuando era niña viví vistiendo lo que mi madre quería. Eso, y lo que mi madrina y ella me hacían. No había otra opción. Tampoco me preocupaba, sabía que mi madre tenía buen gusto. Por un lado veía a otras niñas con prendas o zapatos que me hubiera gustado que me dejase usar, pero hoy le doy las gracias por no hacerlo. Así que nunca la martiricé demasiado. Hasta que me volví adolescente. Empecé a rebelarme y tuve mis épocas, pero GRACIAS Mamá otra vez por no dejarme hacer (o debería decir comprar) siempre lo que quería. Siempre confié en sus consejos y a día de hoy lo sigo haciendo.

Llegada una cierta independencia económica que me permitía comprarme ropa con mi propio dinero, llegó el caos. Soy consumista a más no dar, me gusta ir de compras hasta al super. No sé, me fascina. En eso también me parezco a ella. ¿Y quién me para? Nadie. Y he ahí el punto de locura máximo viajando y viendo cosas nuevas, marcas nuevas, tiendas increíbles y cazando tendencias al aire, como con pinzas, intentando darles siempre mi toque. Sí, mi toque. Eso y siguiendo algunas cuantas reglas de oro:

Hoy va la primera: Ser uno mismo. Ya sé que suena tópico y típico, pero me refiero a adaptar aquello que nos gusta a nuestro cuerpo y a nuestras circunstancias. No quedarse con: se llevan las rayas marineras, ¡voy a vestirme cual grumete toda la temporada! Si las rayas marineras no te sientan bien, simplemente, no las uses. Busca tu estilo y adapta la moda a tí. Es la única forma de que funcione. ¿Cómo se adapta la moda a uno mismo? Cuando llevas algo que haces tuyo, es simplemente tuyo y de nadie más. Da igual que otra chica pase con el mismo vestido. Tu lo has hecho tuyo, ya sea con un cinturón, con un broche, con la chaqueta con que lo lleves o los zapatos con que lo combines. Las posibilidades son infinitas, sólo hace falta explorar y ser uno mismo. Literal.

Sí, el shopping online es uno de mis hobbies, me puedo volver loca. Y busco y rebusco y veo y vuelvo a mirar cosas de mil sitios y fotos de gente de muchos otros lugares. Y un día hace como un mes, sin más, decidí compartir todo esto en forma de blog. Nada de cámaras profesionales ni modernismos temporales muy propios de estos tiempos. Simplemente, un blog sobre mi toque.

.. Y aquí es donde el título de la entrada cobra sentido.







No hay comentarios:

Publicar un comentario